En un segundo tiempo para el olvido y con mucho por corregir, Racing se despidió de la Copa Argentina.
Las caídas pueden ser muy duras y pegar en el ego del ser humano, La Academia sigue sin encontrarse con el juego que Diego Cocca quiere imponer, en un partido donde se dividieron los tiempos para cada equipo, Racing mostró su peor cara.
En el primer tiempo, Racing encontró juego asociado entre sus líneas, intentó salir del fondo tratando bien el balón, jugó simple, con triangulaciones, yendo de adentro hacia afuera y luego terminar las jugadas por cualquier banda, centros con profundidad y pases claros en ¾ de cancha.
Fue así como a los 38 minutos llegó el primer gol luego de una jugada asociada por la derecha, con una pelota en profundidad de Oroz para Lisandro López, toque al corazón del área y gol de Zaracho.
A los 45 minutos del primer tiempo, la electricidad de Zaracho y un buen traslado del balón, hicieron que llegue el segundo gol luego de un rebote largo de Gabbarini que tomó Lisandro y jugo rápidamente al centro del área para que El Pulpo González haga el gol.
De Olimpo poco y nada en el primer tiempo, algunas llegadas y centros que descolgó fácilmente Musso, un solo remate que complicó al joven arquero académico.
En el comienzo del segundo tiempo, Racing empezó atacando y en una jugada en profundidad por la banda derecha estuvo a punto de conseguir el tercer gol. Luego de esto, y en una salida rápida, Olimpo consigue el penal, que luego se transformó en el descuento del equipo de Bahía Blanca.
De esa acción en adelante Racing desapareció del terreno de juego, dejó la asociación de líneas, y las triangulaciones entre Oroz, Zaracho y González, pasó a ser un equipo sin medio campo donde el libre tránsito del equipo rival fue de antojo.
Así llegó el empate en una jugada donde “El Pulpo” despejó dos veces la pelota hacia adentro, y con un remate desde afuera del área, el jugador Tomás Costa puso el 2-2.
De esta manera Racing se hundía más en la nebulosa y se prestaba al juego de Olimpo, que era nada más y nada menos jugar con la desesperación Académica.
Luego de una pelotazo largo desde el arco, Troyansky puso el 3-2 con una gran desatención de Orban.
Anecdótico fue el cuarto gol ya en el minuto 90 y con otro error grosero de Lucas Orban.
De esta manera Racing quedó eliminado por un contrario que supo aprovechar las falencias de una Academia, (de errores), que jugó a ser su mismo rival.
Mucho para pensar y diagramar para el próximo partido por Copa Sudamericana, Racing es un equipo inconstante y sin rumbo entre los mismos jugadores, la cara de la doble moneda, la infortuna, los bajos rendimientos, pesan al momento de la derrota.
Esperemos que el 13 de septiembre cuando nos enfrentemos con Corinthians por Copa Sudamericana, la moneda caiga a nuestro favor.
Martin Alvarez
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