Con Falcioni en la U Católica, se espera una oferta por Hauche. Además, la CD quiere transferir a Corvalán.
Casi en coincidencia con la decisión de contratar a Diego Cocca, los dirigentes de Racing asumieron otras responsabilidad: la de establecer como política institucional la atribución de fijar altas y bajas, más allá de la necesaria intervención del técnico. Es decir, habrá un filtro que, en su funcionamiento, resolverá qué se acepta y qué se rechaza.
Aún en vacaciones -el grueso del plantel al trabajo se prevé para el 12 de junio-, el arranque del equipo para este segundo semestre seguramente traerá novedades. A pesar de que todavía la AFA no comunicó oficialmente si para el último torneo corto del profesionalismo habrá restricciones para las compras -está instalado el rumor de que el mercado recién se liberará en enero, ya en vísperas del certamen de 30 equipos-, en Racing ya piensan en las modificaciones de la nómina a cargo de Cocca.
El DT, aún en Defensa y Justicia, con la palabra comprometida para asumir una vez que termine la temporada de la B Nacional, tiene en mente reforzar, como prioridad, la defensa y el medio. Atrás, ve como sensible el sector izquierdo. Existe una coincidencia: para autoridades y entrenador, la permanencia de Claudio Corvalán en el plantel no es prioridad. Por eso, ya le comunicaron -vía representante- que ante una oferta dejará el club. Hace dos años, el ex Quilmes se sumó cuando se avanzó en una reestructuración profunda, con Luis Zubeldía en el armado del conjunto. Lejos de ganarse el puesto, Corvalán, en ese lapso, fue de lo más vulnerable. La inversión (600.000 dólares) difícilmente se recupere, pero eso, de todos modos, no hará que Racing se desprenda del lateral izquierdo por monedas. El caso de Gabriel Hauche es diferente, ya que si bien Cocca aspira a retenerlo, la posibilidad de una cesión al exterior no es mirada con desagrado. Con Julio Falcioni como flamante técnico de la U Católica, apareció la posibilidad de una oferta desde Santiago. El Emperador ya lo quiso en Boca. Y eso es un buen indicio.
Cabe recordar el Demonio había acordado, de palabra, la renovación de su contrato. Pero no lo firmó ni lo hará hasta que Racing le pague lo que le debe en concepto de impuestos. El delantero tiene contrato hasta junio de 2015 y el nuevo entrenador contaría con él.
fuente Olé
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