. El técnico charló con los jugadores y dividió al grupo entre los que jugaron y los que no. Viola pudo hacer fútbol en espacios reducidos y podría llegar al próximo encuentro.
Con la expectativa que desató el regreso de Reinaldo Carlos Merlo al club, el equipo volvió a entrenarse, sin tener el habitual día de descanso posterior a cada encuentro, para intentar enderezar el rumbo futbolístico lo antes posible. El entrenador se presentó con el plantel y comandó el ensayo, que duró 75 minutos, que se realizó en el estadio y que tuvo una parte física y otra más ligada al juego.
Los jugadores se dividieron en dos grupos, según el nivel de exigencia en el último fin de semana. Los que fueron titulares en Primera y en Reserva realizaron varios bloques de trote en el campo seguido de elongación. Los otros, Battaglia, Migliónico, Aued, Viola, Luis Ibáñez, Campi, Melillo, Quílez y Dinenno hicieron pasadas y fútbol en espacios reducidos. Musso y Nelson Ibáñez se incorporaron a la hora del ejercicio con pelota.
Por otra parte, Regueiro estuvo en kinesiología y llevó a cabo tareas de movilidad en la cancha junto a Juan Alvarez. Camoranesi, en cambio, vino al club pero no participó de la sesión porque se someterá a estudios para conocer la gravedad de la lesión muscular en la cara externa del muslo izquierdo. Por último, Pillud, que se está recuperando de la hepatitis viral que sufrió a finales de agosto, regresó a los ensayos y se quedó con el médico en un costado del terreno.
La práctica del martes será abierta para la prensa a partir de las 10.
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